CÓMO NOS GUSTA EL FÚTBOL

Por fin ha empezado todo otra vez. Cuantas ganas teníamos de que el balón rodara de nuevo. Des de aquel 22 de mayo han pasado doce semanas y tres días, es decir, casi tres meses sin fútbol de clubes. Es cierto que se ha disputado un Mundial, el mejor Mundial de España, pero para muchos el peor Mundial de la historia. 64 partidos con un sonido espantoso de fondo, un balón travieso, unos arbitrajes lamentables y tan poco fútbol…
Sólo España, Alemania, Uruguay y a ratos Holanda supieron a qué jugaron. Decepciones de Argentina y Brasil, con palos para todos y suerte que se ha descubierto a algún jugador, porque sino hubiese sido inaguantable.
Dejando de banda el Mundial, volvemos a tener fútbol del bueno. El fútbol que nos gusta, el de la mezcla de nacionalidades, el de la Premier, la Serie A, la Liga, la Bundesliga…la Champions! Todo vuelve a empezar de nuevo, con algunas novedades en los clubes, pero no demasiadas. La economía mundial se ceba también con el fútbol y nos deja sin un mercado de intríngulis como cada verano, para ver cuál será el fichaje bomba. Supongo que la bomba ya fue antes del verano, cuando David Villa anunció su fichaje por el Barcelona o Silva se despidió de la afición “che” para marcharse al proyecto que más ha gastado esta temporada, al Manchester City. Poco movimiento de portadas. Incluso algunas han cansado con tan poco movimiento, que si el Barça quiere a Cesc, que si Cesc quiere ir al Barça, que si Cesc bla bla, que si Wenger otro bla bla…demasiado han cansado los periódicos de Barcelona con el tema del centrocampista de Arenys. Incluso llego a cabrearme cuando sólo hablan de eso y centran la atención del culé en una operación de demasiados millones de euros, para recuperar un jugador que se regaló en su momento. Tanto ha sido el culebrón que se ha dejado marchar a Touré Yaya, el mejor medio-centro que ha tenido el FCBarcelona en muchos años, intentando sólo el fichaje de Cesc sin valorar lo que se estaba perdiendo.

De verdad poco movimiento, pero no ha dejado de ser interesante. Algunos fichajes me parecen acertadísimos. Wenger, como siempre, acierta en todo y se lleva a uno de los mejores delanteros actuales, Marouanne Chamakh. Tremendo jugadorazo, al igual que Mesut Özil, elevado por todos en el Mundial, pero elevado por los que saben de verdad desde hace más de dos años. El Madrid se lleva a una perla, y sino el tiempo lo dirá.
Otro gran nombre es el de Chicharito Hernández, un goleador mejicano que ya veremos si le quita el puesto a Berbatov, pero todo indica que el búlgaro no es el delantero que más gusta a Ferguson de los tres que tiene.

Pero bueno, lo importante ha empezado, la Premier empezó el sábado y nos dejó con sensaciones bastante contradictorias. El Manchester City, que parecía que se iba a comer el mundo, se salvó de milagro en White Hart Lane gracias al relevo de Given, Joey Hart, recuperado del Birmingham este verano. Ni Touré, ni Silva, ni los clásicos Tévez, Wright-Phillips o Barry supieron tener el control del balón y crear ocasiones, hecho que hace dudar de la inversión y de Mancini, que por cierto, ha decidido prescindir de Stephen Ireland y de Craig Bellamy. Me parece genial que James Milner se incorpore al proyecto, pero dejar marchar a Ireland me parece una de las mayores burradas del mercado de traspasos. Por otra parte, el Chelsea apabulló 6-0 al pobre West Brom, que nada pudo hacer ante Drogba, Anelka y compañía. El ManUtd logró una buena victoria 3-0 ante el Newcastle, en que lo más destacado fue el golazo de Giggs, primer jugador de la historia de la Premier en marcar en 20 ediciones seguidas (todas las que ha jugado). Y por último dejo el que tenía que ser un partidazo. En Anfield se enfrentaron Liverpool y Arsenal, unos sin Torres en el once y los otros sin Cesc. El partido fue bastante malo, y cuando el Liverpool tenía la victoria en el saco salió el Speaker, el cantante de la Roja, para hacer gala de su hobby y meterse él y balón dentro de la portería. Empate final, puede que justo, pero no para Reina, que no se lo mereció.

También empezó la Ligue 1 francesa. Horrible primera jornada en que ninguno de los grandes fue digno de empezar. El campeón cayó en el campo del Valenciennes, el Girondins en casa ante el Toulouse, el Lyon lo hizo en Caen, el Auxerre empató en Brest y PSG y Lille empataron a cero. Patético todo.

En fin, primera jornada interesantísima en Premier y horrible en Ligue 1, y quedan 37. Vamos a disfrutar de lo lindo esta temporada y espero poder decir lo mismo cuando empiecen las otras ligas.


ADRIÀ SOLDEVILA